23 de septiembre de 2014

Los restos de la fábrica

La fábrica de harinas de Santibáñez cada vez es más un recuerdo. Tras el abandono llegó el derribo y este verano, cuando pasé por el pueblo, vi que ya casi no quedaban más que restos amontonados... triste final para una de las pocas industrias que hubo durante años en la zona.

Esto es lo que queda del lugar al que fueron nuestros abuelos y padres para conseguir la harina con la que amasar el pan y hacer la comida. Porque antes no se iba a la balda del super y se cogía lo que a uno le daba la gana. La harina era el final de un proceso lento y trabajoso, desde la siembra del trigo, la siega, la trilla, la recogida, guardar hasta el último grano en los sacos y llevar hasta la fábrica para convertirlo en polvo básico en la alimentación de entonces.







Tolvas, correas, tuberías,... hasta las famosas candongas, las chimeneas que coronaban el tejado del edificio, se retuercen ahora en una esquina, mientras las escavadoras dejan despejado el terreno de lo que fue la fábrica de harinas.

18 de septiembre de 2014

Tortilla dulce con sabor a abuela

Ayer no sabía que hacerme de cena y eché mano de lo más socorrido: unos huevos (además de pueblo, de esos que cada uno tiene un tamaño y todos la yema superamarilla). Los batí y lo que iba a ser una mera tortilla francesa cambió a medio camino. Recordé las tortillas con azúcar que me hacía mi abuela y eso hice, una tortilla francesa con azúcar por encima... ¡¡¡Estaba deliciosa y me transportó a mis años de niña!!!




Cuando yo era una cría, mis abuelos aún tenían hacienda y cultivaban las tierras. Mis padres se pasaban todo su mes de vacaciones ayudándoles en la siega, la trilla, los riegos... Todos se iban pronto de casa y cuando me despertaba iba a la cocina de humo y allí tenía mi desayuno: la tortilla de huevo con azúcar por encima que me dejaban hecha... hummm, qué rica y como me recuerda a mi abuela Menta. 

Cuando ya crecí un poco, me seguía dejando la tortilla pero ya podía prepararme un vaso de leche en la pequeña cocina de tres fuegos que había en la cocina de humo (toda la comida principal se seguía haciendo sobre el fuego). Me dejaban leche de cabra recién ordeñada, antes de que el animal saliera con la cabreada, que me bebía en mi enorme taza de porcelana (siempre guardaba algo para compartirlo con las gatas de casa...). 

En fin, teletransportación en el tiempo a partir de una noche tonta en la que no saber qué hacer de cena...

11 de septiembre de 2014

Pintxos a la ayoína












Patatas alioli – alitas fritas – alitas guisadas – crestas – langostinos – mollejas – croquetas – patatas bravas – chorizo – jamón – ensaladilla – empanadilla – huevo revuelto – setas con cebolla confitada – albóndigas – mejillones en vinagreta – pechuga con salsa de nata – muslitos picantes... uff, estas son algunas de las cosas que han desfilado por mis ojos este verano, cuando mis acompañantes o yo íbamos a tomar algo a alguno de los bares del pueblo... Una variedad que hace la boca agua y, no lo olvidemos, por la cara, acompañando a la bebida que se pida. Y sea en el bar de arriba, en el bar de abajo, en el chiringuito o, mi preferido de Santibáñez, el Xandra... ¡¡marchando una de pintxos!!

3 de septiembre de 2014

A vista de paramotor...

Además de bicis, camiones, autobuses, coches y carretillas, en Ayoó ha aparecido un nuevo artefacto móvil que no ha dejado de sorprendernos cuando lo vemos: el paramotor de Mikel.

Mikel es el marido de Nekane, la hija de Rodolfo y Mari Nieves y desde su paramotor, su parapente con motor, surca los cielos de Ayoó haciendo que todos levantemos la cabeza para ver ese cachivache de colores que anda por ahí arriba. El, por su parte, aprovecha que está ahí, para hacer fotografías de lo que tiene a sus pies. Y alguna de estas fotos las puso Nekane en el grupo de Ayoó en facebook y ahora me las ha pasado para que las pueda compartir en el blog. Gracias a ambos, estas son las imágenes...


El pueblo y Peñacabras, la loma sobre la que está recostado... así, en foto, no se notan tanto las cuestas, jaja... Lo que si se ven perfectamente son las hileras de piedra que forman la peña.


En esta, se ve Ayoó con Requeijo a medio término y los montes de León de fondo, una pasada de imagen...


Claro que ya se sabe aquello de "cazador, cazado"... estas son las fotografías de Mikel en plena acción:



Esta es una foto de Web Master de AyoodeVidrialescom, que tiene un camarón y se le acercó mucho más cuando estaba en pleno vuelo.
Aquí, el motor del artefacto volador, cogido en la zona de Las Suertes una mañana de este verano: