8 de febrero de 2013

Cestería (1)


Antes de que el práctico y generalmente feo plástico lo llenara todo, los pueblos conseguían fabricar sus propios recipientes a través de la cestería. Con materiales recogidos entre las plantas que crecían en su territorio, con unas técnicas sencillas y efectivas y unos vecinos hábiles, los cestos llenaban todos los huecos: se usaban para llevar mieses, recoger cosechas, acercar las uvas a la bodega, guardar la costura, transportar la comida o almacenar la harina, entre otros usos.


Vendimiadores.Web de La Puebla de Montalbán (Toledo).


Dando de comer al caballo en un cesto.
Web de La Puebla de Montalbán (Toledo).


Comida durante la trilla en la era donde se observa un cesto para llevar la comida
y un garrafón de vino con cesto exterior.
 Web de Sordillos de Treviño (Burgos)

Mas telogones en la vendimia.
Web de Pedrosa del Rey (Valladolid).

Esta otra imagen de una vendimia, con los talegones en el carro, es del pueblo
de Vegas del Condado (Valladolid). Aquí su web.

En Ayoó había varias personas que se encargaron durante años de abastecer a los vecinos de cestos: el Ti Indalecio, el Ti Felipe Lobo o el Ti Pedro Alonso.

Septiembre era el mes en el que se preparaba “la mimbre”: Primero había que cortar las varas y para ello, para tener una “buena corta” había que hacerlo en luna menguante. En creciente se apalillaba y si se esperaba a primeros de octubre, se estropeaba la madera.

Después se metía a ablandar, a “enriar” en pozos de agua y en regueros, como el del Ti Carbajo o el Punte la Flora. Se ponían los ataos de mimbre con piedras y se dejaban como 20 días.

“A los que los hacían -recuerda mi padre- se les pagaba unas 6 o 7 pesetas por talegón que servían para llevar las uvas, las patatas...”

En Ayoó ya no queda nadie que trabajo en este campo, pero la cestería es un arte que aún se conserva en algunos pueblos. En el Museo de Castrocalbón, que ya dije que me pareció muy interesante, tenía un destacado apartado a la cestería y también se puede consultar a través de su página web. De allí he sacado los siguientes textos, en los que se explican las plantas que se usaban, cómo se trabaja y para qué servían los objetos que salían de las manos de los artesanos.

Talegas. Web de Malva (Zamora).


Las plantas de las que se sacaban las varas que se trabajan eran el sauce, la palera, la zarza y el centeno.


El sauce del Coito.
El sauce. El mimbre es una fibra natural que procede de las varas jóvenes del sauce. Es una de las fibras vegetales más empleadas en cestería, por varias razones. La primera por lo sencillo que resulta obtener sus varas, dado que el cultivo del sauce se extiende con mucha facilidad. La segunda, por lo fácil que resulta de trabajar su madera, ya que es especialmente flexible y a la vez resistente.





Palera en el camino a la Viña del Lomo, cerca de Requeijo.
La palera es un árbol de la familia del sauce que crece especialmente en las orillas de los ríos o en zonas pantanosas, dado que necesita humedad permanente. De ella se emplean en la cestería las ramas más jóvenes, de tono rojizo, por su flexibilidad y ligereza.


Yolanda Cano, en su Estudio Etnobotánico de Ayoó señalaba que los brotes nuevos de la palera se utilizaban antaño para hacer “cañizos” para los carros y para fabricar tornaderas.

Detalle de la hoja  de palera
 
Zarza envolviendo el antiguo molino de Congosta, cercano a la presa.
La zarza. Su nombre científico es Rubus Ulmifolius derivado del latín “ruber” (rojo) en alusión a su fruto (la mora) y del parecido de sus hojas a las del olmo (olmilolius). Es una planta muy invasiva que crece rápidamente, en especial en las laderas de los ríos, en monte bajo o en los bosques.

Para cestería se emplean las cortezas de sus tallos, cubriendo atados de paja de centeno y tejiendo la propia corteza.

 


Centeno. Imagen de Wikipedia.

El centeno. El centeno como uso doméstico se remonta al Paleolítico tardío y se cultiva por su grano como planta forrajera.

Ha sido un elemento muy importante para la arquitectura tradicional de nuestra comarca, ya que era parte fundamental para la elaboración del adobe (mezcla de arcilla, agua y paja de centeno).

En cestería se ha empleado la paja de centeno para la elaboración de escriños, escriñas, gronas, etc... especialmente el centeno de ciclo corto (sirvendo o tardío). Las pajas gruesas servirán para la base y las más largas para las “paredes” de la cesta.
 
 
 
 
De botánica sé poco, así que me fio de los que conocen más que yo y mi madre, en los paseos que damos por el pueblo, me hizo distinción de varios tipos de árboles, todos relacionados con el sauce: La mimbrera, la palera, la salguera y la salguera negra. Son plantas diferentes y todas ellas se usaban en cestería y en otros usos como hacer los mangos, partes del arado, del carro, etc.
 
La palera es esta:
 
 
 
 
La mimbrera, esta:
 
 
 
La salguera, aquí:
 
 
Y aquí las tres plantas juntas (que es muy posible que yo haya confundido una por otra en las fotos...), junto al Almucera, junto al Puente la Flora:
 
 
 
Además está la mimbrera negra, que era muy apreciada para la cestería pero que ya casi no quedan ejemplares en Ayoó. Este se encuentra cerca de nuestro huerto, en Perafondo:
 

 





3 comentarios:

Anónimo dijo...

Estaria bien que pusieras el proceso de recoleccion y tratamiento de las mimbres, desde que se cortaban hasta que se empezaba a hacer las cestas

IRM dijo...

Tranquil, que hay Cestería 2 :)

Anónimo dijo...

Exactement là où je pourrais trouver cette plateforme Weblog particulier pour elblogdeayoo.blogspot.ru?