30 de enero de 2010

Palabrero Ayoíno (8)

Arencoso – Que se está quejando y protestando por todo. En mi casa se le solía dedicar este adjetivo al abuelo Teófilo, que era “arencoso” profesional, aunque buena gente en el fondo.

Bobo, boba – Expresión que suele usarse en las conversaciones entre conocidos, para enfatizar algo que se está contando, nunca como insulto, “que no, boba, que no se lo dio”. Mi abuela Menta solía usarlo mucho en sus charlas con vecinos y familia.

Caballería – Así se llama en general a los caballos, mulos, machos, yeguas y en sentido figurado, a alguien que es muy burrote.

Forqueto – Patizambo. Forqueto viene de forqueta u horqueta, que según el Diccionario de la Academia es la parte del árbol donde se juntan formando ángulo agudo el tronco y una rama medianamente gruesa. Cuando alguien anda con las piernas muy separadas se dice que lo hace a modo de horqueta.

Galán, galana - Expresión que se usa en las conversaciones, algo así como el “majo, maja” más actuales.

Jijas – Delgadito, estar en los huesos. Se dice “es un gijas”. En el Diccionario de la Real Academia aparece en su segunda acepción como forma irónica de "hombre endeble" que se usa en Palencia, Avila, León, Salamanca y Valladolid. Y también en Ayoó.

Jumento  – En el Diccionario de la Academia un jumento es un asno o burro y figuradamente, se convierte en un adjetivo cuando se llama así a una persona a la que le da todo igual, que no le importa lo que digan de él.

Luna – Expresión de cariño, muchas veces se le dice a los niños.

Maula - Persona payasa. Muy propio de la abuela Menta que decía lo de “es una maula”.

Palurda - Que no ve más allá de sus narices.

Rosa – Como luna, una expresión de cariño para referirse.

Salado, salada - Se usa en las charlas, es un adjetivo cariñoso, para alguien que te cae bien. Vendría a ser como el majo o maja, más actuales. "¡Hala, salao, me alegro de haberte visto!".

¡Qué guapa estás! - Si te lo dice una persona mayor en el pueblo ¡¡¡es que has engordado!!

Estar como el espíritu de la golosina - Estar extremadamente delgado. Esta era otra de las expresiones típicas de mi abuela Menta.

Todas estas palabras y las que hemos ido recopilando en los demás Palabreros y en los Diccionarios publicados por la Asociación Furmientu, el de Begoña Santos y el de Andrés Castaño están juntitas y más o menos organizadas en este blog auxiliar que he puesto en marcha para que se puedan consultar y encontrar de forma fácil. Palabrero Ayoíno es la recopilación de todo lo publicado hasta ahora y tendrá un enlace directo aquí a la derecha, bajo el epígrafe Páginas interesantes... (para mi)
Jumento

26 de enero de 2010

Las tiendas

Si queremos comprar una botella de aceite, una tableta de chocolate o un cepillo para la ropa, vamos hasta la tienda de Carmen, la única que ya queda en el pueblo, tras cerrar Trini la suya. Pero desde los años cuarenta (antes no llega nuestra memoria prestada...) ha habido un buen puñado de negocios que surtían a los ayoínos de lo más básico.

Frente al lugar donde ahora está el Ayuntamiento, se encontraba la tienda del Ti Dámaso, en la que daban por ración en los años de postguerra, es decir, vendían con los cupones del racionamiento.

De ración eran, asimismo, los productos que se podían adquirir en el establecimiento de Ismael Ferreras (tío de mi Tío Ismael, con el que coincide en nombre) y Manuela. En el local, situado en El Canto, en una casa donde ahora Domingo guarda sus perros, cerca del bar de Antonia, había aceite, azúcar, algo de bacalao, galletas e incluso tenía una pequeña parte de bar, de café de los de antes, muy modesto, nada que ver con los de ahora.

El Ti Celedonio Tostón, padre de Ezequiel, Arcadio, Benigno... tenía un negocio en el que vendía un poco de todo, desde puntas a aceite y pimientos. Estaba por donde la actual casa de Arcadio que en su día también tuvo una pequeña tienda-bar. Asunción, siempre recordada por el bar que tuvo durante años, puso una pequeña tienda durante no mucho tiempo en ese espacio, una vez cerrada la taberna.

La tienda por definición de la que yo me acuerdo desde pequeña es la de Ezequiel y Angelina, en El Canto. El establecimiento estaba en la habitación que hay a la derecha de la puerta pequeña de la casa y recuerdo el olor que tenía, no sé a qué, a azúcar, a madera... a tienda de pueblo. Tenía un pequeño mostrador y aparadores de madera con los productos... y la balanza con las distintas pesas en orden y que yo toqueteaba mientras mi madre hablaba... Allí no se compraba como ahora, se iba sin prisas, se charlaba sobre la familia (la señora Angelina es prima de mi padre, hija de una hermana de mi abuela Menta), se hacían las cosas con calma, ir a comprar era más una cita social que un recado apresurado.

Balanza en una vieja tienda. Web de Xiplo

Además de los establecimientos digamos, fijos, había vecinos que ofrecían otros productos, además de los vendedores ambulantes que llegaban a Ayoó.

Mi abuelo vendía chocolate de Castro, del de Santocildes, y café que conseguía como podía. El Ti David, el pregonero, vendía pescado y había uno de Congosta que iba a comprar huevos por las casas.

También estaban “los gallegos” que llegaban con un cajón a la espalda para vender artículos de mercería, hilos, botones, agujas... También gallegas eran las “colchoneras” que llegaban con los fardeles en la cabeza, llenos de sábanas, toallas y otros tejidos para la casa.

Junto a ellos, que se ganaban la vida duramente, viniendo desde su tierra y recorriendo los pueblos, aparecían estafadores. Decían que vendían ropa para la casa y eran unos ases engatusando a la gente a la que engañaban con malos tejidos o directamente, con timos. Mi madre recuerda como mi padre mandó hacer un traje y la tela era tan mala y estaba tan mal hecho que nunca se lo pudo poner.

En una ocasión, a una mujer de Congosta, la engañaron con artimañas,diciéndole que conocían a un pariente lejano y ganándose su confianza. Le dejaron el fardo a cambio de dinero para un imprevisto que supuestamente les había surgido. La mujer, que acababa de vender una vaca, se lo dio y cuando vio que no volvían, abrió el fardo y se lo encontró llenó de papeles y sin nada de valor.

En tiempos más recientes también ha habido (y sigue habiendo) vendedores ambulantes (de los legales eh?). Los hay "fijos" como Pepe el de Santibáñez, que ponía sus ropas en tenderetes en la Audiencia; la pescadería de Jose el de Congosta, las tartas y pasteles de la de Jiménez o los Congelados de los de Ponferrada. Y los hay que vienen de vez en cuando a mostrar su cacharrería, bien sea de ferretería y cosas para la casa, bien zapatos, bien cualquier otro producto.

Ferretería ambulante fotografiada en Agosto de 1998

Y casi la misma imagen, diez años después...

El chico del camión de los congelados de Ponferrada, que le prometí sacar su foto en internet!!

22 de enero de 2010

La pedrada en Radio Euskadi

No, no es que desde Radio Euskadi nos tiren piedras, a ver si vamos a liarnos... es que tienen un espacio en el programa Más que Palabras que conduce mi... churri-contrario-marido, una sección realizada por Jaio, en la que eligen un lugar que los oyentes y seguidores tienen que ir adivinando a través de las pistas que ponen en la web del programa y que desgranan en antena el fin de semana. Y en este final de enero ha tocado... bueno, no lo digo, que estaría mal, pero os pongo lo que han publicado hasta ahora a ver si lo cazáis...




Al presentador de MQP le costó treinta segundos encontrar la piedra de esta semana. No lo decimos para impresionar ni para farolear. De hecho, hasta podéis tomarlo como una pista extra, pues los procesos mentales de nuestra juguetona espía Jaio son, como los caminos del Señor, inescrutables. Tenedlo en cuenta por si, de primeras, sentís una migaja de confusión. Con la ayuda de Google, no es nada difícil. Vamos con las cinco primeras pistas:
1ª Uno de los últimos glaciares de la península Ibérica estuvo en estos parajes, provocando el valle en forma de U que alberga el pueblo que buscamos. Un valle verde cuyos viñedos son de variedad de uva Garnacha.
2ª Es tierra de manantiales, tantos que sus casi 400 habitantes pueden beber de más de 24 fuentes en los alrededores.
3ª En el Valle (no en el pueblo, ¡ojo!) destaca un campamento romano. Los Templarios también anduvieron por alí.
4ª Se formó en el siglo X en el ya inexistente monasterio de este lugar un cenobita cuyos “bolos” milagrosos son considerados como parte de las piezas de ajedrez del primer santo al que se relaciona con este juego.
5ª Tienen una ermita dedicada al mismo santo que determinada Catedral de Bilbao no reconocida por la Iglesia oficial pese a los miles de fieles que suelen visitarla.
¿Más difícil que otras veces? Tal vez, pero ahí está también la gracia del juego. En cuanto penséis que habéis dado con la respuesta, hacédnosla llegar a masquepalabras@eitb.com o al Teléfono del Oyente, 901 44 04 04. ¿Premio? La verdad es que no lo hemos pensado, pero algo habrá, sin duda, aunque todos coincidimos en que no hay mejor recompensa que el propio juego.



Siguen las pistas en Radio Euskadi... aquí va la segunda parte del juego...

Con excepciones, porque siempre hay algún despistado, ha vuelto a quedar demostrada la sagacidad y el el sentido de la orientación de nuestros buscadores y buscadoras de piedras. De nuevo las cinco primeras pistas han arrojado un altísimo índice de aciertos. Pero como Jaio se ha tomado el trabajo de pensar otras cinco -incluso alguna de reserva-, y como es probable que hay quien aún no haya atinado, ahí va una nueva remesa de claves:

6ª En este entorno es fácil encontrar somormujos y fochas y plantas aromáticas como la jara, el tomillo y la lavanda.

7ª En tiempos usaban la “hemina de trigo“, como moneda de pago.

8ª Hay quien cree que el portero del Real Madrid tiene allí una calle dedicada, pero no es así, pues ya existía antes de que se diera a conocer.

9ª Uno de los hijos más populares de este pueblo es un conocido periodista, habitual de numerosas tertulias televisivas y radiofónicas. Está casado -y nunca mejor dicho- con otra famosa periodista catalana a quien podemos leer, por ejemplo, en El Mundo.

10ª Todos estos datos los podéis encontrar en un magnífico blog dedicado al pueblo, bajo un precioso nombre que significa poco más o menos “pintas”, y que es sinónimo de la palabra también local “atopos”, aunque su origen más creíble puede estar en la palabra “delantal”.

Esperamos vuestras respuestas en masquepalabras@eitb.com o en el Teléfono del Oyente 901 44 04 04. (Si contestáis a través del blog, no activaremos la respuesta hasta que resolvamos el concurso)

Saldremos de dudas mañana domingo al comienzo de la última hora, la Temática, dedicada a una palabra que os sonará: piedra.

Si alguien tiene interés en ver lo que se dice, aquí, en esta página, tenéis un enlace para poder escuchar el programa en directo a través de internet.






Pués ya está resuelto... Ayoó de Vidriales ha protagonizado "Las pedradas de Jaio" y lo bueno es que casi todas las respuestas iban bien encaminadas desde el principio, así que o los oyentes conocen muy bien a Javi o Ayoó es tan famoso que no nos hace falta ni Fitur ni gaitas!!!

Aquí os dejo el texto final que aparece en la web de Mas que Palabras, junto a la foto del tractor de Antonio el de Avelina pasando por el arco...


Una vez más, ovación cerrada para las buscadoras y los buscadores de piedras que, salvo dos excepciones, no han tenido la menor dificultad en llegar hasta Ayoó de Vidriales, la entrañable localidad zamorana donde Mata Hari Jaio había escondido la de este fin de semana. ¿Qué es eso de “entrañable”? ¿Acaso no es un paraje único a cinco minutos de ser declarado Patrimonio del Universo? Ejem… No exactamente, pero eso es lo de menos. Como tantos y tantos pueblos de cualquier lugar del mundo, lo que hace único a Ayoó es que forma parte del equipaje sentimental de quien ha pasado un buen puñado de vacaciones allá. Y por supuesto, si preguntáis a cualquiera de sus cuatrocientos habitantes, ninguno dudará en deciros que no hay otro sitio igual en los mapas. Conste que todo esto os lo dice alguien que padece un peculiar síndrome urbanita cuando lleva más de dos de semanas por allá
Pero dejémonos de preámbulos y vayamos con las explicaciones de las diez pistas:
1ª Uno de los últimos glaciares de la península Ibérica estuvo en estos parajes, provocando el
valle en forma de U que alberga el pueblo que buscamos. Un valle verde cuyos viñedos son de variedad de uva Garnacha. [Tal cual. Lo que poca gente sabe es que esa uva zamorana era adquirida para la elaboración de Ribeiro, uno de los vinos gallegos por excelencia. Desconozco si sigue ocurriendo, aunque imagino que no.]
2ª Es tierra de manantiales, tantos que sus casi 400 habitantes pueden beber de más de 24 fuentes en los alrededores. [Podéis comprobarlo en este álbum de Picasa de IRM, de quien os hablaremos más adelante.]
3ª En el Valle (no en el pueblo, ¡ojo!) destaca un campamento romano. Los Templarios también anduvieron por allí. [El campamento se llamaba -y se llama-
Petavonium. Una sacristía de la Orden del Temple es la base de la actual iglesia de Carracedo, población perteneciente a Ayoó, aunque la wikpedia hable de ella como municipio.]
4ª Se formó en el siglo X en el ya inexistente monasterio de este lugar un cenobita cuyos “bolos” milagrosos son considerados como parte de las piezas de ajedrez del primer santo al que se relaciona con este juego. [Aquí estuvo enclavado el monasterio de Ageo, Ayoó, en la actualidad el monasterio llamado "San Fructuoso de Ageo" o simplemente "Ageo", que dio nombre a la población que creció en torno a él. De Ageo el nombre derivó en "Agio", "Ayio" y de posteriormente "Ayoó". De allí partió
San Genadio para refundar al otro lado del Teleno el Monacato berciano (finales del siglo IX), según dejó escrito él mismo en su 'testamento' , después de ser obispo de Astorga y retirarse al maravilloso y cercano a Vidriales Valle del Silencio hasta el año 936 en que muere. San Genadio probablemente pasó sus últimos años jugando al ajedrez, y murió en el Valle del Silencio, y lo recomendaba a sus monjes como una ayuda para la concentración y un vehículo para acercarse a Dios.]
5ª Tienen una ermita dedicada al mismo santo que determinada Catedral de Bilbao no reconocida por la Iglesia oficial pese a los miles de fieles que suelen visitarla. [Hablamos de la ermita de San Mamés, en cuyo honor se celebra fiesta el 7 de agosto.]
6ª En este entorno es fácil encontrar somormujos y fochas y plantas aromáticas como la jara, el tomillo y la lavanda. [Podéis ir y comprobarlo.]
7ª En tiempos usaban la “hemina de trigo“, como moneda de pago. [Y ni no sabéis lo que es una hemina,
aquí tenéis la explicación.]
8ª Hay quien cree que el portero del Real Madrid tiene allí una calle dedicada, pero no es así, pues ya existía antes de que se diera a conocer. [Sí, la calle Casillas existe en Ayoó desde mucho antes de que Iker naciera...]
9ª Uno de los hijos más populares de este pueblo es un conocido periodista, habitual de numerosas tertulias televisivas y radiofónicas. Está casado -y nunca mejor dicho- con otra famosa periodista catalana a quien podemos leer, por ejemplo, en El Mundo. [Nos referimos a
Antonio Casado, todo un enamorado de su pueblo, que visita en cuanto tiene un par de días libres. Su esposa es Carmen Rigalt.]
10ª Todos estos datos los podéis encontrar en un magnífico blog dedicado al pueblo, bajo un precioso nombre que significa poco más o menos “pintas”, y que es sinónimo de la palabra también local “atopos”, aunque su origen más creíble puede estar en la palabra “delantal”. [ Ese blog no es otro que
Avantales, casi diariamente alimentado con mimo, paciencia y cariño desde Santurtzi por la periodista (en su día también de Radio Euskadi) Isabel Riesco. ¡Como si no tuviera bastante con aguantar en casa al pesado del director de MQP!]
Con lo útltimo, ya tenéis muchos cabos atados. Si pasáis por allá, a lo mejor nos encontramos y tomamos una Mahou por un euro. Pero no preguntéis por mi, que no me conocen, sino por la hija de Antonio Cucharilla.

20 de enero de 2010

El camino fantasma


Estábamos una tarde de verano en El Coito cuando mi madre me hizo ver algo en lo que yo ni me había fijado: el viejo camino que atravesaba las eras, que pasaba por La Rosina, Traslaseras y Campoferrero hasta Valdemanil, aún era perceptible en la hierba del campo de juego. Efectivamente, la calzada de piedras y una cuarta de polvo que durante mi niñez me llevó hasta las eras del chopo de mis abuelos, a jugar con las lombrices negras de agua en el reguero, a beber en mi fuente preferida, la del Coito... la vía que recorrí en el carro de vacas, a pie o en la bici... seguía marcándose en la hierba. Su forma se ve más verde y perfectamente reconocible por donde iba, como si su fantasma no quisiera marcharse del todo a pesar de los años y los cambios de la zona.

17 de enero de 2010

San Antonio Abad en Ayoó

El 17 de enero es el día de San Antonio Abad en el santoral católico y en este día, era costumbre en el pueblo llevar las patas de los cerdos al cura. Este las bendecía y se quedaba con ellas. Se las vendía habitualmente al Ti David el de la Ti Mielga y con lo que sacaba, el cura tenía para algunos gastos del templo, como las velas.

A San Antonio Abad se le suele representar como a un anciano con el hábito de la orden de los Hospitalarios, de color negro y la tau o la cruz egipcia y como atributo, una cruz en forma de T y a sus pies, un cerdo. Por diversos actos de su vida se le considera un benefactor de los animales, a los que protegió y que le ayudaron.


En Ayoó hay una imagen de San Antonio en el retablo del altar, en la parte de arriba de la calle de la derecha. Mi cicerone por el templo (otro día tocará esta historia) me dijo que este era San Antonio de Padua, pero lo cierto es que por la iconografia, la forma de retratar al santo, más parece una figura que representa a este San Antonio Abad. Pero como yo no sé mucho de santos, si alguno puede aclarar si el Santo ayoíno es el ermitaño (San Antonio Abad) o el franciscano (San Antonio de Padua), le quedaría muy agradecida.

NOTA - Se me olvidó poner el final de esta historia: consulté con Ramón, webmaster de la página "Tus pregunas sobre los santos" (http://preguntasantoral.blogia.com/) y me contestó lo siguiente: Tú misma lo dices, es San Antonio Abad... el habito blanco y el escapulario marron (a veces es azul) con la Tau, no dejan dudas... Y os aseguro, que él es todo un experto, así que nada, el dichoso santo, San Antonio Abad!!!!

14 de enero de 2010

Historias de la mili: La comida


Un día estaba en la cama, en el cuartel, y fue uno de Villarín y me dijo “mira, Carbajo (1), no tengo ni paquete, ni perras ni nada y tengo un hambre que me caigo, sé que tú sueles tener paquete, a ver si me puedes dar algo para comer, que no aguanto”. Y fui hasta la taquilla, que sí, que tenía un paquete que me habían mandado y le di un trozo de tocino. Se lo comió con unas ganas y un agradecimiento que para qué... al cabo de los días, ahí vino el hombre, con medio queso que me traía a cambio de haberle calmado el hambre aquel día... Por cierto, no se podía tener jamón en la taquilla, si se enteraban, capaces eran de arrancártela para quitártelo...

Otro caso parecido me pasó con un asturiano llamado Espina, Secundino Díaz Espina y me dijo “Carbajo, que tengo un hambre que me muero y sé que tú tienes comida”. Le di y luego él estuvo destinado en la cocina y me llevó un par de chorizos frescos que cuando pudimos y de forma discreta, fuimos a asar a una campa. Y cuando me veía siempre decía, “este Carbajo, que quita el hambre oh!”.

(1) En la mili te decían, al pasar revista, el nombre y el apellido y tú tenías que contestar con el segundo. Por ejemplo, gritaban Antonio Riesco y yo decía, Carbajo. Y al final, todo el mundo se llamaba y se conocía por el segundo apellido.

10 de enero de 2010

La parada caballar


Semental de la parada de Ayoó de Vidriales, provincia de Zamora. Ganó el primer premio en Zamora el año 1923. Si quieres todos los detalles, pincha aquí y conoce la historia completa.


Hace casi dos años falleció el señor Juanito (Juan Ferreras Campomanes) en Ayoó y a raíz de su óbito me enteré del que había sido el negocio de su familia, uno de los más destacados de Ayoó en la primera mitad del siglo pasado. Aquí tenéis la conversación, un tanto desbarajustada, por si queréis leer el origen de este pequeño artículo que ahora escribo y que está redactado a partir de lo que allí se contó y de lo que me ha explicado mi padre.

La familia Ferreras tenía una parada caballar con tres caballos y dos burros que se repartían en diferentes cuadras de la casa en la que ahora vive la señora Laudelina, la madre de Loli. Como no había otro negocio de este tipo la demanda era alta, como me cuenta mi padre: “Venía gente de toda la contorna, del Valle, de la Valduerna, de Cubo, de Rionegro... ¡hasta de Truchas! Todos los días había al menos 15 yeguas esperando ahí en la calle que casi no se podía ni pasar. Había herraduras puestas por la pared para enganchar las caballerías.”



La segunda casa, a la izquierda en la imagen, era la que albergaba la parada caballar.
El sistema de monta poco tiene que ver con lo que ahora se hace, con inseminaciones artificiales, probetas, asepsia y control (en este artículo os podeis hacer una idea de cómo se hace todo esto ahora). “Tenían que echar la yegua varias veces para asegurar que estaba preñada y aún así no era fijo, claro. Antes de pasar al caballo padre la yegua iba al Rifón, el Berlín, que así se llamaba (le decíamos el rifón porque era el que las rifaba a las yeguas). Si veían que la yegua estaba dispuesta la pasaban al caballo bueno”.

El señor Juanito, Juan Ferreras Campomanes, con el caballo Berlín, el "rifón" de su parada caballar.
Foto de la exposición del verano de 2013 organizada por la Asociación Perafondo.


“También tenían dos burros para hacer la mezcla. Para que salgan machos y mulas tenían que echar a la yegua al burro. Al burro lo engañaban y le enseñaban una burra y luego le echaban la yegua. El caballo tenía que montar a la burra para que hubiera mulos burreños y machos burreños, que son nobles y con fuerza y que se pagaban más caros.”

Al principio cobraban una hemina de trigo y después iba el señor Juanito por los pueblos a cobrar el servicio, que se hacía hubiera quedado la hembra preñada o no. Las caballerías eran caras, se pagaba por un mulo pequeño, por una cría, hasta 7.000 pesetas en la Carballeda.

El señor Juanito llevó después el negocio a su casa que estaba por donde la actual Casa de los Cazadores. El negocio se debilitó cuando instalaron una parada caballar militar en Castrocalbón y, al parecer, prohibieron la de Ayoó. Aún así, ya muy lejos de los días de esplendor, la parada se mantuvo hasta los años 80.

8 de enero de 2010

Picotazos


La fiesta de Reyes pasó y no se hizo nada para los niños en Ayoó y eso que, por lo que me dicen, ganas no faltaron. Me cuentan que intentaron sacar un remolque, tirar unos caramelos, adornar y dar un poco de ambientillo a pequeños y grandes pero que no se pudo hacer... Una pena que habiendo chavales con ganas, no encontrasen a ningún responsable municipal que les ayudase un poco y que se hubiera podido hacer algún acto bonito, congregar a la gente en torno a un chocolatito caliente, unas risas, un poquito de ambiente navideño... Ganas no les faltan, a pesar del chasco, a ver si el próximo año podemos contar lo que sí se ha hecho y no lo que se pudo hacer y no se pudo porque no encontraron colaboración.

7 de enero de 2010

Palabrero Ayoíno (7)

Ajagar - Morder en las gorjas, en la garganta.
Arrebañar - Rebañar, dejar el plato sin una gota de salsa utilizando a base de bien el pan.
Arrudiar - Recoger algo alrededor con una cuerda o similar.
Atragollarse – Atragantarse.
Descarapuchar - Cortar la parte de arriba por la que crece el árbol.
Encaraputinar - Hacer un montón alto y dejarlo en pico, como colmar.
Enchaguazar - Echar más agua de la debida, por ejemplo en el riego.
Enratar - Cuando se enreda una cuerda.
Entropicar – Empujar.
Hacer campo o hacer lugar - Dejar sitio.
Ir a rompemata - Meterse en el monte y tener que andar entre los arbustos, las jaras... deforma dificultosa.
Olivar - Quitar las ramas bajas para que nazcan mejor los árboles. En la
definición del Diccionario de la Academia, enfaldar o podar las ramas bajas de los árboles para que las superiores formen buena copa, como se hace a los olivos.

5 de enero de 2010

Noche de Reyes





Noche de Reyes, de dejar los zapatos limpios, agua para los camellos, dulces para los Reyes y sus pajes... noche de nervios entre los niños hasta ver, por la mañana, qué regalos les han dejado sus majestades. Y todo eso, después de ver en carne y hueso (y pelucas, betún y maquillaje...)a Melchor, Gaspar y Baltasar.

Las imágenes son de la recepción de los Reyes Magos a los niños de Ayoó en el año 2004 y me las ha hecho llegar un amigo a través de un Power Point. No sé quién las ha hecho, pero desde aquí le agradezco que haya retratado este momento mágico para los niños del pueblo.

2 de enero de 2010

Tal como éramos




Mucho ha ido cambiando la fisonomía de Ayoó, de las calles embarradas y las piedras como acera a tenerlo todo de cemento y en los últimos tiempos, de asfalto. Hasta las callejas que suben a Peñacabras están ahora urbanizadas, como se ve en esta foto de la culaga que está enfrente del bar de Loli, por donde se sube a la casa que ahora tienen allí Ricardo y Sofía.

Pero este "antes y ahora" me sirve para echar una mirada atrás, al recuerdo de lo mucho que he compartido con mi amiga Hermi, la que está conmigo en la foto. 25 años nada menos me separan de esta imagen, de estos momentos en los que nos íbamos como locas a pasar la Navidad en el pueblo, a chupar frío y diversión, momentos de charla, de risas, de abuelas en la casa que nos prestaran... La vida y las circunstancias nos han ido separando pero siempre nos quedarán los buenos ratos del pasado y, espero, algunos que vendrán en el futuro.